Siempre ha sido complicado encontrar en Europa discos de Rock cristiano y a pesar que en los 80’s el género sufrió un gran crecimiento, la única manera de conseguirlo por el viejo continente era viajar en busca de ellos.
El Rock cristiano empezó prácticamente con Larry Norman en 1969 con Upon This Rock. Un disco que tuvo una influencia con tanto alcance que inspiró a toda una generación de bandas deseosas de difundir su mensaje. Bandas como Servant, Petra, o The Sweet Confort band comenzaron a desafiar el mercado secular en busca de esa parte del pastel por explorar… y así nació el rock cristiano.
En los 80’s mientas el AOR cristiano crecía, empezó a surgir otro tipo de metal completamente en las antípodas como eran bandas como Motley Crue, Wasp, o Ratt. Y que todas tenían su doble en versión cristiana. Holy Soldier, Bloodgood o Guardian se estaban haciendo un nombre, pero por encima de todos destacaba una banda del resto. STRYPER, cubierto de estridentes spandex amarillas y negras que se convirtió en el gigante bíblico del rock.
Stryper se formó en 1982 en el condado de Orange, California, por los hermanos Michael y Robert Sweet, Oz Fox y Tim Gaines (que se unió a la banda procedente del grupo secular Stormer). Inicialmente, se llamaban Roxx Regime, pero el cambio de nombre se produjo después de que el grupo se dedicara a Dios. Stryper, un acrónimo que aparentemente significa “Salvación a través de la redención que produce paz, aliento y rectitud”, se hizo famoso en la escena hedonista de los clubes de Hollywood, un lugar extraño para encontrar una banda cristiana devota, tal vez. Pero como dijo Michael Sweet en ese momento: “No crecimos con música cristiana, no crecimos en la iglesia, crecimos con el metal y la escena de los clubes de Hollywood. Esa es nuestra historia”.
Una demo grabada en sus días en Roxx Regime les aseguró un contrato con Enigma Records, lanzando su mini álbum debut en 1984 The Yellow And Black Attack. La contraportada mostraba a cuatro hombres adultos luciendo el tipo de cortes de pelo que pondrían celoso a cualquier rockero de Los Ángeles ochentero, y luciendo prototipos de sus característicos trajes amarillos y negros (un truco que Michael Sweet ha denunciado desde entonces, diciendo: “Si hubiera sido por mí, probablemente no hubiera usado el amarillo y negro en ese entonces”).
Aunque a Sweet no le gustaba la imagen de su banda, sin duda la exprimieron al máximo. En la portada de su primer álbum de larga duración, Soldiers Under Command, estaban inundados de material negro y amarillo. Junto con lo de arrojar Biblias, bombardeando a su público con versiones de bolsillo del Libro de Dios en los shows, estaban demostrando ser una atracción bastante irresistible. Mientras WASP gritaba a los pervertidos, Stryper predicaba a los conversos.
Cuando se lanzó su primer álbum de larga duración To Hell With The Devil en 1986, Stryper ya estaba en camino de convertirse en disco de platino, gracias principalmente al éxito de su balada Honestly , que alcanzó el puesto número 23 en las listas de Billboard, y su video que explotó en la MTV.
Para muchos, su cuarto lanzamiento, In God We Trust de 1988 , fue el último gran álbum de Stryper, y su continuación, Against The Law, de 1990 , marcó el fin de una era. Stryper vio la nueva década con una nueva imagen y una nueva dirección lírica, pero Michael Sweet restó importancia a su nueva apariencia: “A veces se nos considera una banda efectista, pero me gustaría que nuestra música eclipsara el amarillo y el negro”.
Lamentablemente, eso no sucedió, ya que Stryper se desintegró dos años después, cuando Michael Sweet abandonó la banda para seguir una carrera en solitario. Los tres miembros restantes continuaron durante un año más antes de separarse. Tras volver a reunirse una década después, siguen grabando discos hasta el día de hoy y, una vez más, visten el amarillo y el negro.
Stryper era como ese tipo del grupo que no quería participar en cualquier idea loca y maravillosa que se les ocurriera a tus amigos a las 2 de la mañana, el único tipo que no terminó en una cárcel porque se quedó en casa mientras el resto se fueron de juerga el fin de semana. Puedes querer a Stryper todo lo que quieras, pero el hecho es que hicieron todo lo posible para quitarle toda la diversión al movimiento musical más gloriosamente hedonista, temerario e incendiario de los 80.
Lo que Stryper realmente hizo fue crear un nuevo mercado secundario de metal que existe justo debajo de nuestras narices y que ni siquiera conocemos. Para casi cada subgénero de música pesada hay una versión cristiana inferior que toca en el circuito especializado. Death metal cristiano, grindcore cristiano, black metal cristiano. Búscalo y lo encontrarás. Básicamente, eso es culpa de Stryper.
Stryper llegó a la escena y sacudió el mundo de la música cristiana y el heavy metal secular con música contundente pero melodiosa y letras que abordaban abiertamente la fe y las creencias de sus miembros. Muchos fans de la música cristiana y profesionales de la industria creían que un grupo que tocaba heavy metal, un género que a menudo se asocia con el diablo y el lado oscuro, no tenía lugar en esta escena, incluso si sus canciones compartían mensajes cristianos. Y aunque Stryper disfrutó de un breve período de gran éxito a fines de la década de 1980 (el tercer álbum de la banda, “To Hell with the Devil” lanzado en 1986, convirtió a Stryper en el primer grupo cristiano contemporáneo en obtener un álbum de platino), el grupo nunca fue completamente aceptado en los círculos del heavy metal y el hard rock, en gran parte debido a las letras cristianas.
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